viernes, 10 de febrero de 2012

Dios resiste a los soberbios y da gracia a los humildes


La humildad nos permite ser pacientes con los errores de los demás. Mientras caminamos en amor y oramos por las personas, Dios obrará y tratará con sus fallas. Aún cuando en ocasiones se nos haga difícil soportar a los demás, la Palabra de Dios nos fortalece y nos capacita para hacer Su voluntad.
Es difícil tratar con la gente orgullosa, porque rehúsa la corrección y el buen consejo. De hecho, Proverbios 16:5 dice: "El Señor aborrece a los arrogantes". Nadie les puede decir nada, porque ellos piensan que lo saben todo, están siempre a la defensiva, lo cual les dificulta recibir corrección. La gente orgullosa piensa que está en lo cierto y que todos los demás están equivocados. Trata de decirle a la gente cómo debe cambiar o qué debe hacer. Esa clase de enfoque de superioridad, dominante, no es del agrado de Dios. Él quiere que sus hijos sean amables y humildes, no arrogantes y orgullosos.
El orgullo se manifiesta cuando una persona se tiene en más alta estima que los demás, pero Dios dice que todos somos iguales ante sus ojos, ninguna persona es mejor que otra. Recuerde eso, y estará bien encaminado para poder evitar el orgullo. No se engañe creyendo que el orgullo lo llevará a donde quiere ir.
Ser humildes es reconocer que sin Dios nada somos y nada podemos, que todo lo que tenemos viene de Dios. La gente orgullosa no es realmente gente feliz. En cambio la gente humilde es feliz y lleva alegría a otros.

lunes, 6 de febrero de 2012

LA OBEDIENCIA

El mayor ejemplo de obediencia nos lo dio nuestro SEÑOR JESUCRISTO:
Haya pues, en vosotros este sentir que hubo también en CRISTO JESÚS, el cual siendo en forma de DIOS, no estimó el ser igual a DIOS como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta muerte, y muerte de cruz. (Filipenses 2:5-8).
Según el diccionario obedecer significa: cumplir la voluntad de quien manda. Cumplir esta voluntad implica reconocer la autoridad, es sabido por todos que la primera autoridad en nuestras vidas la tiene DIOS y a Él le debemos nuestra obediencia, leemos en 
Hechos 5:29 Respondiendo Pedro y los apóstoles dijeron; “Es necesario obedecer a DIOS antes que a los hombres”, nótese que dice es necesario esto significa que no es una alternativa o una elección sino una necesidad; por esto obedecer a nuestro PADRE tiene que partir de una decisión personal donde pongamos en práctica el amor y del deseo de agradarle. También debemos obedecer a otras autoridades que él pone en nuestra vida como nuestros padres, pastores, y jefes. Leemos en (Romanos 13:1 - 2) Sométanse toda persona a las autoridades superiores, porque no hay autoridad sino por parte de DIOS, y las que hay, por DIOS han sido establecidas. De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por DIOS resiste; y los que resisten, acarrean condenación para sí mismos.
Decide hoy mismo caminar en obediencia y verás como la bendición y la recompensa de Dios vendrá sobre tu vida. Demuestra que eres hijo de Dios obedeciendo y no dudes que Su favor estará todos los días en tu vida.



sábado, 4 de febrero de 2012

¿Quieres ser un vaso para honra?

Yo anhelo cambiar y estoy segura de que tú también lo deseas. Mediante el poder del Espíritu Santo que está en nosotros, podemos ser capaces de reflejar dulzura, bondad y amabilidad, aunque las cosas no sean como esperamos. Ser capaces de mantener la calma cuando todo a nuestro alrededor parece darse vuelta, cuando todo parece conspirar contra nosotros para hacemos impacientar, enojar y perder la serenidad.  
La cantidad de tiempo que requieren los cambios dependerá de: 1) cuánto tiempo nos tome reconocer ante Dios que tenemos un problema; 2) cuánto tiempo nos lleve dejar de dar excusas o de echarles la culpa a otros; 3) cuánto tiempo le demos vueltas a la situación, tratando de cambiarla nosotros mismos; y 4) cuánto tiempo pasemos estudiando Su Palabra y adorandolo.
Si nuestro deseo es ser vaso para honra, debemos disponernos, humillarnos, descender a la casa del Alfarero, y ponernos en Sus manos... Él hará un buen trabajo en nosotros.


 

jueves, 2 de febrero de 2012

CONOCER A DIOS


Conocer a Dios y glorificarlo es el fin principal del hombre. Es sólo por el conocimiento de Dios que nos damos cuenta de  que Dios es Santo y que nosotros somos perversos. Dios es bueno y nosotros no. Dios es sabio y nosotros no. Dios es fuerte y nosotros débiles. Como resultado de conocer a Dios, nuestro orgullo es humillado y nuestra hipocresía descubierta. Contemplamos la infinita perfección de Dios y a la vez cuán impotentes somos. Hoy, toda clase de asuntos son perseguidos con entusiasmo; pero el conocimiento de Dios es rechazado. Al estudiar la Palabra de Dios llegarás al conocimiento y su presencia, te despojará de tu orgullo y verás la gloria de Dios. La palabra de Dios penetra a nuestro intelecto y corazón y trae nuestra naturaleza pecaminosa a la superficie. Nuestros pensamientos, motivos y pecados ocultos yacen desnudos ante Dios. La palabra de Dios es poderosa y cambiará nuestras actitudes al mismo tiempo que renovará nuestras mentes. “Lo que pido de ustedes es amor y no sacrificios, conocimiento de Dios y no holocaustosOseas 6:6

miércoles, 1 de febrero de 2012

¿Quieres saber lo que Dios quiere para ti?


Si quieres saber lo que Dios quiere para ti, entonces conviértete en AMIGO DE DIOS, ¿Cómo?, tan fácil como buscarlo, habla con El, cuéntale como te sientes, aprende mas de El leyendo su Palabra, trata de quedar bien con El como con tu mejor amigo.
Muchos nos olvidamos que Dios quiere ser nuestro amigo, El quiere contarnos lo que quiere hacer con nosotros, pero muchas veces no puede porque lejos de ser un amigo de Dios, eres un desconocido que solo se acerca a El cuando tiene una necesidad o cuando la casa se esta quemando. Dios quiere ser tu amigo sin un interés por medio, el quiere platicar contigo, contarte sus planes para ti, pero es necesario que comiences a verlo como un amigo, dedícale tiempo, haz lo mejor que puedas por agradarlo, queda bien con El, que seguramente El estará encantado de ti y te considerará su amigo.